Un estudio realizado por la Facultad de Medicina de la Universidad de Boston, determinó que obtener vitamina D está relacionado con un menor riesgo de sufrir infecciones graves por coronavirus y padecer síntomas graves como confusión, pérdida de conocimiento, dificultad para respirar y muerte.
Además, aseguran que las personas que incorporan suficiente vitamina D tienen un riesgo 52% menor de morir por coronavirus, que aquellos que tienen deficiencia de la “vitamina del sol”.
Los científicos, analizaron los efectos del aislamiento en la salud y la importancia de la vitamina D, que necesita de la exposición al sol y al aire libre para incorporarse adecuadamente al organismo.
Tras el estudio, llegaron a la conclusión de que existe suficiente evidencia científica para determinar que la deficiencia de este compuesto “del sol” aumenta el riesgo de contagio.
La vitamina D juega un papel fundamental en el sistema inmunológico y puede combatir la inflamación. A partir de años de investigar este compuesto, se sabe que la falta de vitamina D afecta tanto al sistema inmune innato como al adaptativo e incorporarla puede tener un papel en la protección contra virus respiratorios.
Según los expertos, las personas que no obtienen suficiente vitamina D tienen muchas más probabilidades de enfermarse gravemente, desarrollar sepsis o incluso morir después de contraer el coronavirus.
¿Dónde se obtiene la vitamina D?
La luz solar es la fuente más importante de vitamina D. La reacción de la luz ultravioleta con el colesterol desencadena la producción de la vitamina. Pero las personas con piel más oscura tienen más melanina, lo que dificulta que la piel absorba los rayos UV y que se produzca la vitamina D.
Sin embardo, además de la exposición solar, también se puede absorber vitamina D a través de la alimentación, aunque en dosis más pequeñas, al comer los siguientes alimentos:
- Pescados: salmón, trucha, caballa, esturión, pez espada y bacalao, sardina.
- Hongos o setas: portobellos y rebozuelos.
- Leche: incluye leche baja en grasa, leche con chocolate baja en grasa, leche de soja, leche de almendras y leche de arroz.
- Yogur: la mayoría de tipos y sabores.
- Huevo duro.
- Cerdo.
- Jugo de naranja fortificado.
- Cereales fortificados.