Hay situaciones que parecen dignas de una película de Hollywood, por ejemplo, lo que acaba de ocurrir mientras se celebraba una misa.
Increíble pero cierto
En la parroquia Nuestra Señora de los Trabajadores de Villa Caraza, Lanús, un hombre se abalanzó sobre su expareja con la intención de apuñalarla, tras haber comulgado.
Afortunadamente, el párroco del lugar logró interponerse entre el agresor, identificado como Oscar Eduardo Casagrande, y la mujer, llamada Dolores Mirta Rolón, evitando que se concretara el femicidio.
Una situación de terror
Sentado en la última fila de asientos, el hombre tenía un cuchillo de carnicero escondido y lo sacó de improviso para atacar a su ex.
El sacerdote advirtió lo que ocurría y se puso delante de la mujer, mientras el resto de los feligreses lograron quitarle su arma al atacante.
Rolón presionó el botón antipánico y efectivos de la comisaría 5ta. de Lanús llegaron y redujeran a Casagrande.
Diego Kravetz, secretario de Seguridad de Lanús, reconoció “este fue un caso tremendo y si no hubiera sido por la intervención del cura y de los vecinos que estaban en misa hoy estaríamos hablando de otro femicidio en el país”.