Un camionero, completamente borracho, circulaba por la Ruta 227 entre las ciudades de Necochea y Lobería, poniendo en grave riesgo la vida de otros conductores.
Durante más de 10 kilómetros, el camión zigzagueó de banquina a banquina, casi chocando con varios vehículos que circulaban en sentido contrario. Una camioneta se vio obligada a salirse de la ruta para evitar una colisión frontal.
Dos testigos que circulaban en el mismo sentido decidieron mantener una distancia segura mientras uno de ellos documentaba la escena con su teléfono móvil. En la filmación, se observa al camión cruzándose al menos con diez vehículos, poniendo en riesgo a cada uno de los conductores y ocupantes de cada uno de ellos.
Los testigos llamaron a la Policía para informar sobre el comportamiento peligroso del conductor. Luego, se armaron de valor para adelantar al camión y obligarlo a detenerse. Gracias a su rápida intervención, el conductor fue finalmente detenido, evitando potenciales accidentes fatales.
Al realizarse las pruebas correspondientes, se constató que el camionero tenía 1,7 gramos de alcohol en sangre, muy por encima del límite permitido.
Este episodio subraya la importancia de la responsabilidad al volante y la necesidad de reportar conductas peligrosas para proteger la vida de todos en las carreteras.
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