En un vuelo comercial de Aerolíneas Argentinas viajaron 60 dosis de Sputnik V desde Ezeiza a El Calafate fuera de protocolo, la Justicia se encuentra investigando este caso.
Desde la Fiscalía Nº3, a cargo de Eduardo Taiano, indicaron que analizan si forma parte de maniobra en la causa por la vacunación VIP en el Hospital Posadas, que terminó por expulsar a Ginés González García del Ministerio de Salud, o bien que sea un nuevo hecho vinculado a las irregularidades en la distribución de las vacunas en distintos puntos del país.
Este dato lo aportó la diputada Graciela Ocaña en el expediente en el que interviene la jueza María Eugenia Capuchetti. En la denuncia detalla que el avión que llevó las dosis a la ciudad santacruceña partió el 23 de enero a las 8:40 horas. En ese momento, los agentes de la Policía de Seguridad Aeroportuaria (PSA) recibieron un llamado de una autoridad de la aerolínea.
Este llamado lo realizó Gustavo Javier Bahut, jefe de la central de monitoreo del Hospital Posadas, quien solicitaba el permiso de ingreso de un enviado de Carla Vizzotti. El emisario había entregado una conservadora que pasó por el escáner destinado al control de la tripulación.
La PSA por su parte, realizó un control de rutina sobre el contenido de la refrigeradora, con el fin de controlar que no ingresara al avión ningún elemento que pudiera peligrar el vuelo, y se pudo constatar que se trataba de las vacunas rusas. Además, entre las indicaciones pidieron la entrega en mano de las dosis de Sputnik V al comandante de Aerolíneas, en una zona restringida, destinada al ingreso de los pilotos y azafatas.
“De confirmarse estos hechos, es evidente que la sustracción de las 60 dosis tuvo por objetivo proveer a algún vacunatorio vip, constituyendo una nueva modalidad de la apropiación indebida de medicinas que debe suministrarse a las poblaciones de riesgo, para beneficio de amigos del poder o directamente integrantes del gobierno”, indicó en la denuncia la diputada Ocaña.
Asimismo la legisladora solicitó al fiscal que se verifiquen las cámaras de seguridad de los aeropuertos internacionales de Ezeiza y El Calafate, que se tome declaración a Bahut y al comandante del vuelo.
Si bien se desconoce el destino de las vacunas una vez que llegaron a El Calafate, podría tratarse de un intercambio interhospitalario pero no se siguió el protocolo para el traslado de vacunas al interior del país, ni aclararon la maniobra.
