Entre la noche del sábado y la madrugada del domingo, el cielo ofrecerá todo un espectáculo: una lluvia de estrellas que podrá verse con solo alzar la vista desde un lugar no muy iluminado.
La explicación del fenómeno, dada por el Observatorio Astronómico de Córdoba (Oac) indica que, como todos los años, en esta época, la Tierra se encontrará con una nube de escombros perteneciente a la cola del famoso cometa Halley. Al atravesar la atmósfera y convertirse en meteoros, algunos de esos escombros brindarán un espectáculo conocido como lluvia de estrellas.
Con un cielo despejado y sin demasiada contaminación lumínica podrán divisarse más de 20 meteoros por minuto. El material que compone estos meteoros proviene del cometa Halley. Entre los restos de su último paso por ese lugar hace más de 30 años hay rocas y polvo que, al ingresar a la atmósfera, generan brillos amarillos o verdosos en el cielo.