Un tren menos, un sueño menos: el dolor por la suspensión del tren a Pinamar

Este domingo, el silbato del tren a Pinamar resonó con un matiz diferente. No era solo el sonido característico de cada jornada, sino el eco de una despedida. Vecinos de General Guido y General Madariaga se acercaron a las vías para ver pasar, quizás por última vez, el servicio ferroviario que unía estas localidades con la costa atlántica. Con gestos de nostalgia y tristeza en sus rostros, no pudieron disimular el dolor que les genera la decisión del gobierno de Javier Milei de suspender el recorrido.

El tren, que recorre los 96 kilómetros entre General Guido y Divisadero de Pinamar, dejará de circular a partir del 1 de abril debido al deterioro de la infraestructura ferroviaria y de los puentes en el trayecto. Trenes Argentinos justificó la suspensión alegando razones de seguridad, en el marco de una serie de obras que buscan mejorar el sistema ferroviario en todo el país. Sin embargo, para los vecinos y comerciantes de la región, la medida no es más que otro golpe al transporte público y a la economía local.

“Nos quedamos sin una vía de comunicación esencial. No todos tienen la posibilidad de viajar en colectivo o en auto”, expresó un comerciante de Madariaga que, como muchos otros, dependía del tren para el flujo de clientes y turistas. La incertidumbre también crece entre los trabajadores que utilizaban el servicio para trasladarse, y que ahora deberán buscar alternativas más costosas.

Ante el anuncio, el ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires, Martín Marinucci, manifestó la voluntad del gobierno bonaerense de hacerse cargo de la operación del tren, siempre y cuando la Nación transfiera el material rodante y las vías necesarias. Esta propuesta busca evitar el desmantelamiento definitivo del servicio, pero hasta el momento no ha habido respuestas concretas por parte del Ejecutivo nacional.

La suspensión del tren a Pinamar se suma a otras decisiones que han afectado la conectividad ferroviaria en la provincia, como la postergación del regreso del tren a Tandil. Mientras tanto, quienes desean viajar a la Costa Atlántica aún pueden optar por el tren a Mar del Plata, aunque los pasajes para abril ya muestran una alta demanda.

Para los habitantes de General Guido y General Madariaga, la tristeza no es solo por la pérdida de un medio de transporte, sino por lo que representa: una historia de años, encuentros en la estación, y la conexión con un destino turístico emblemático. Este domingo, mientras el tren se alejaba, algunos alzaron sus manos en un gesto de despedida, con la esperanza de que no sea un adiós definitivo.

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