El concejal evangélico Abel Soria, organizó un encuentro de 300 personas en una iglesia el pasado 19 de abril sin respetar los protocolos contra el coronavirus. Al día siguiente, arrojó resultado positivo de Covid-19.
“Yo no renuncio, a mí me puso Dios”, afirmó Soria ante el pedido de su renuncia a la banca, que será tratado el próximo viernes 7 de mayo en una sesión extraordinaria por el Concejo Deliberante de Las Termas de Río Hondo, en la provincia de Santiago Del Estero.
El concejal evangélico se encuentra imputado y deberá presentarse a una declaración indagatoria el 12 de mayo ante el fiscal coordinador de la Unidad Fiscal de Las Termas, Ignacio Guzmán: “Soy víctima de una campaña en mi contra para sacarme la banca de concejal. Pero sepan que no voy a renunciar porque ahí me puso Dios”, declaró Soria.
“Soy completamente inocente de lo que se me acusa. Hay gente que realmente atentó contra la salud y hoy acusa. Yo en todo momento pedí el cuidado, el distanciamiento, en la iglesia nadie se saluda”, se defendió y agregó que “en la ciudad hay encuentros donde hay más de 300 o 500 personas“.
Por otra parte, explicó que tenía entendido que los templos solo podían utilizar el 30% y que en los encuentros religiosos que él organiza, asisten 600 personas, y en la oportunidad en la que fue acusado de violar el protocolo, solo había 200.
