Este jueves se confirmó el fallecimiento de Josefa, la única sobreviviente del trágico derrumbe del hotel en Villa Gesell ocurrido hace poco más de un mes. La noticia conmocionó al país, que seguía de cerca su evolución tras el devastador accidente.
María Josefa Bonazza, conocida como “Pelusa”, falleció a los 79 años tras complicaciones de salud derivadas del derrumbe del hotel Dubrovnik en Villa Gesell, ocurrido el 29 de octubre. En esa tragedia, su esposo, Federico César Ciocchini, de 84 años, perdió la vida, mientras que ella fue rescatada después de permanecer alrededor de ocho horas bajo los escombros.
El matrimonio, oriundo de Balcarce, se hospedaba en un departamento del edificio Alfio I, contiguo al hotel Dubrovnik, cuando ocurrió el colapso. Habían llegado un día antes con el propósito de preparar la unidad para alquilarla durante la temporada de verano.
Tras el derrumbe, Josefa fue trasladada al Hospital Interzonal General de Agudos “Dr. Oscar E. Alende” de Mar del Plata, donde recibió atención por fracturas en el hombro izquierdo y la muñeca derecha, además de múltiples politraumatismos. Posteriormente, continuó su recuperación en el Hospital Municipal Felipe A. Fossati de Balcarce.
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El 13 de noviembre, sufrió una descompensación que la llevó nuevamente a terapia intensiva. Aunque mostró mejoría y fue trasladada a una sala común el 20 de noviembre, su estado de salud se deterioró en los últimos días, resultando en su fallecimiento.
Josefa relató que, durante las horas atrapada, utilizó técnicas de yoga para mantener la calma y golpeó una piedra en código Morse para enviar señales de SOS, lo que facilitó su rescate.
Abogada de profesión y exconcejal por el ARI en Balcarce, Josefa era propietaria de una boutique de ropa femenina en su ciudad natal. Su esposo, Federico, hijo del reconocido pintor Cleto Ciocchini, era pintor y escultor, con una destacada trayectoria artística.
La muerte de Josefa cierra un capítulo doloroso en la tragedia de Villa Gesell, que dejó un saldo de ocho víctimas fatales y puso en evidencia la necesidad de reforzar las medidas de seguridad en construcciones para prevenir futuros desastres.
