En una impactante tragedia en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, dos trenes de la línea San Martín colisionaron en el barrio de Palermo, sobre el puente ferroviario de Figueroa Alcorta y Dorrego. El choque provocó el descarrilamiento de una de las unidades, generando escenas de caos y desesperación.
Según los primeros reportes, un amplio despliegue del SAME se activó de inmediato ante los informes de personas atrapadas entre los hierros retorcidos.
Al menos 60 personas resultaron heridas, algunas de ellas de gravedad, y fueron rápidamente trasladadas a los hospitales cercanos.
La magnitud del accidente movilizó a equipos de rescate, incluyendo helicópteros, para atender a los afectados.
Sorprendentemente, una de las formaciones solo llevaba al motorman y al personal de mantenimiento, mientras que la otra transportaba pasajeros.
Afortunadamente, el impacto se produjo a baja velocidad, lo que podría haber evitado consecuencias aún más catastróficas.
Sin embargo, el caos desencadenado llevó a las autoridades a disponer alerta roja en todos los hospitales de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, preparándose para recibir y atender a los heridos en esta lamentable tragedia.