Despues de la locura generada por las monedas de un peso acuñadas con la palabra “provingias”, llegó la colección de los billetes de $1000 con errores.
Estos días, se viralizaron billetes de mil pesos con fallas que, al igual que las monedas, se ofrecen a la venta por mucho más dinero que su valor nominal.
Si bien en el ámbito de la numismática en general los coleccionistas eligen billetes antiguos o los que se sabe que pronto dejarán de estar en circulación, también es posible que compren algunos que siguen en circulación pero vienen con fallas de impresión o faltas de ortografía.
Aunque estos últimos son muy codiciados en el mercado, lo cierto es que para conocer cuánto dinero se pagaría por esos es necesario consultarle a algún comprador interesado.
Por ejemplo, para el caso de los billetes de mil pesos de la serie de animales, que en su reverso están incompletos, en Mercado Libre se ofrecen por $20.000, es decir, 19 mil más de su valor nominal.
Las fallas que le dan valor numismático son problemas que a veces se originan en la impresión, y otras veces en el corte. En Mercado Libre y otras plataformas especializadas de venta online, pueden hoy hallarse cientos de billetes defectuosos ofrecidos por $ 5.000, $ 10.000, $ 15.000 o incluso $ 20.000 cada uno.
Cuanto más extraña o insólita sea la anomalía, más caros:
Falta el “1000” que cambia de color
Quien está distraído no lo advierte, pero en el billete de la izquierda no está el número que luce verde y cambia hacia el azul.
En el frente del billete, arriba de la banda de seguridad, debería decir “1000 MIL PESOS” con una tinta que varía del verde al azul según en qué ángulo le dé la luz. Pero se encuentran billetes auténticos en los que esta medida de seguridad no está y por estos ejemplares los dueños los ofrecen desde $6.000 a $15.000.
Fallas en la impresión del número que cambia de color
Algunas veces los dígitos se entrecortan o parecen corridos.
Estos billetes aparecen en venta a precios que van entre los $ 3.000 y los $ 5.000. En estos, el número “1000” verde-azul sí esté presente, pero con imperfecciones. Hay casos en los que la tinta con variabilidad óptica parece corrida, duplicada o desenfocada, o bien se ve entrecortada.
Números y figuras en colores no habituales
Lo que debería verse naranja a veces aparece de un color más apagado y oscuro.
En el frente de un billete normal, tanto el hornero como el número “1000” que está en una esquina deberían ser marcadamente naranjas. Sin embargo, en algunos ejemplares aparecen de un color más pálido u oscuro, o también rojos.
Se están ofreciendo a entre $ 8.000 y $ 15.000.
Errores y desfasajes en el corte
Si la máquina seccionó mal el billete, también puede valer más de lo esperado.
Todos los billetes tienen iguales dimensiones, pero a veces la impresión y el corte no quedan perfectamente alineados. Entonces, lo que sobra de un lado falta del otro, o aparecen figuras levemente torcidas. También es posible hallar, sobresaliendo de un borde, algún sobrante de papel que se le escapó a la guillotina.
“Horneros” con estos defectos hoy se ofrecen por Internet a entre $ 5.000 y $ 8.000 cada uno en la mayoría de los casos.
Manchones y derrames de tinta
Otro defecto muy inusual que se puede encontrar.
También hay gente que ofrece billetes de $ 1.000 afectados por derrames y manchones, provocados aparentemente por la misma tinta que se utilizó para su impresión.
En estos casos, se pueden encontrar ofertas que van de los $ 7.000 a los $ 10.000.
Falta la banda de seguridad
Se detectaron ´horneros´ sin este elemento, que es clave para determinar la autenticidad, aunque no el único.
Una de las principales medidas de seguridad del billete de $ 1.000 es la banda de color amarronado que aparece expuesta en algunos tramos y cubierta por el papel en otros, y que tiene un efecto dinámico. La ausencia de estos segmentos plateados es un error de lo más infrecuente, pero ocurre.
En el mercado es posible hallar billetes de $ 1.000 en oferta con este particular faltante por $ 10.000 a $ 15.000.
Una de las caras, a medio imprimir
¿Y el hornero? En ciertos casos la falla es muy fácil de advertir, ante la ausencia de la principal figura.
En plataformas de compraventa usuarios aseguran haber hallado incluso billetes a los que una de sus caras cara les quedó notoriamente incompleta, con la mayoría de los elementos ausentes, incluido el propio hornero.
Ante la total rareza de estos ejemplares, las personas que se topan con uno están pidiendo alrededor de $ 20.000 para entregarlos, y hay quien pretende incluso $ 25.000.