Un verdadero escándalo se vivió en la noche de la víspera en la Terminal de Ómnibus de la ciudad de Mar del Plata. Distintas irregularidades detectadas sobre las unidades y sobre el estado de los choferes derivó en la suspensión de varios viajes de egresados.
Varios contingentes de egresados debían viajar rumbo a Córdoba y una inspección de la CNRT constató que dos de los choferes no superaron los controles de drogas; en principio fue reportado que habían consumido hojas de coca aunque se esperan nuevos resultados para las próximas horas.
A su vez, en uno de los micros se superaba la capacidad máxima de pasajeros permitida; además constataron que no funcionaban correctamente los cinturones de seguridad.
El titular de la delegación local de la Comisión Nacional de Regulación del Transporte, Cristian Azcona, confirmó que se impidió la salida de los micros porque los choferes y las unidades no estaban en condiciones de viajar.
De tal modo se suspendió la salida de tres micros y se desató un caos entre familiares de estudiantes quienes exigían a los responsables de la empresa una inmediata solución para que los chicos puedan viajar a la brevedad.
Los damnificados corresponden a escuelas de Mar del Plata, Miramar y Lobería.
Los test de control se practican habitualmente previo a la partida de cada servicio. En el caso de los choferes profesionales el límite es cero. En estos casos dieron positivo, por lo que se dispuso la suspensión de las partidas y las correspondientes infracciones.