La Agencia de Recaudación y Control Aduanero (ARCA) anunció modificaciones en los límites para transferencias bancarias y billeteras virtuales, con el objetivo de reforzar los controles fiscales y garantizar la transparencia de los movimientos financieros.
Desde el 1 de enero de 2025, entraron en vigencia nuevos montos máximos permitidos sin fiscalización, los cuales se ajustaron según el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC).
Nuevos montos controlados por ARCA en 2025
📌 Transferencias hasta $500.000
- No presentan restricciones ni controles adicionales.
📌 Movimientos desde $600.000
- Total de consumos con tarjeta de débito en el país.
- Ingresos o egresos en billeteras virtuales.
📌 Movimientos desde $1.000.000
- Acreditaciones bancarias registradas en el mes.
- Depósitos a plazo fijo constituidos en el mes.
- Extracciones en efectivo en el país o en el exterior, por cualquier medio (cajero automático, ventanilla, etc.).
- Saldo final en cuentas bancarias al cierre del mes.
- Saldo final en billeteras virtuales al cierre del mes.
📌 Movimientos desde $2.000.000
- Aplicable solo a billeteras virtuales en transferencias superiores a dicho monto.
Qué pasa si transfiero más de $600.000
Si realizás transferencias por más de $600.000, ARCA podría solicitar documentación adicional para justificar el origen de los fondos. Esto no significa una sanción automática, pero sí la posibilidad de ser fiscalizado.
Documentación que ARCA puede solicitar
Si los movimientos superan los límites establecidos, el organismo podrá requerir la siguiente documentación:
✔ Comprobantes de ingresos o haberes jubilatorios.
✔ Declaraciones juradas de impuestos.
✔ Recibos de sueldo.
✔ Facturas de servicios o ventas realizadas en los últimos meses.
Qué sucede si no se presentan los documentos
En caso de no responder a los requerimientos de ARCA, el organismo podrá aplicar sanciones o bloquear temporalmente las cuentas involucradas, hasta que se acredite el origen de los fondos.
Estos controles buscan prevenir maniobras irregulares, fortalecer la transparencia financiera y garantizar el cumplimiento tributario, sin afectar las operaciones habituales de los usuarios bancarios y digitales.