En las últimas horas desde la Coordinación Zonal de Seguridad Rural Dolores y los diferentes Comandos de Prevención Rural de su jurisdicción están implementando medidas preventivas ante posibles ataques a silos bolsas.
En este sentido, solicitan a los productores rurales que posean silo bolsa en cercanía de las rutas, caminos o zonas de fácil acceso que lo informen al CPR de su jurisdicción, para poder organizar tareas de prevención y evitar posibles daños a la propiedad.
Con 61 roturas de silobolsas registradas en lo que va del año en su mayor parte en Santa Fe, Córdoba, Buenos Aires y Entre Ríos, el común denominador que atraviesa la opinión de dirigentes del agro, diputados y exfuncionarios ligados al campo es que la ola de ataques adquirió una dinámica peligrosa.
El silobolsa, una herramienta que nació a fines de los noventa primero para guardar granos húmedos para ganadería, se expandió enseguida para el almacenaje de granos secos de la cosecha por los beneficios que le vieron los productores: la posibilidad de manejar la logística de la producción y evitar cuellos de botella para la entrega de la mercadería en plena recolección. También la falta de un mayor acopio a nivel general, escalonar ventas y guardar parte de la producción para vender con el fin de enfrentar los gastos, por ejemplo, de una nueva campaña. Más de la mitad de la cosecha, según los años, pasa por los silobolsas.