¿Qué auto es posible comprar con $1.000.000 en Argentina?

Con un millón de pesos en Argentina aún es posible acceder a algunos autos. En esta nota conocé qué auto te podés comprar con ese monto.
Andrea Fernández

El precio de los vehículos en Argentina está en constante cambio, producto de la inflación que no se detiene y que este año 2022 llegó a niveles récord.

Cuando se trata de acceder al primer vehículo lo más común es empezar por un usado. En ese sentido, a continuación te traemos una selección de autos usados que se pueden adquirir con un millón de pesos.

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Autos en Argentina

Autos usados que podés comprar por un millón

Entre los autos usados económicos, los más vendidos en Argentina son el Chevrolet Corsa, Renault Clio, Volkswagen Gol, Ford Ka y Fiat Palio.

Los autos usados que mencionamos, se pueden conseguir por un millón de pesos. No obstante, para conseguirlos por ese precio, hay que buscar desde el año 2010 para atrás y por lo general, en su versión base.

De acuerdo a la Cámara de Comercio Automotor, que publica mensualmente los precios de los autos usados, desde los más baratos hasta los más caros, algunas de las opciones son:

  • Volkswagen Gol: hasta el año 2009 se puede conseguir por el precio mencionado.
    Ford Ka: también hasta el año 2009.
  • Ford Fiesta: hasta el 2008.
  • Fiat Palio y Siena: hasta el año 2007 se puede conseguir por $1.000.000.
  • Fiat Uno: hasta el año 2010.
  • Renault Clio: hasta el año 2005.
  • Renault Megane: hasta el 2007.
  • Renault Twingo: hasta el año 2001.
  • Suzuki Fun: hasta el 2005.
    Chevrolet Corsa: hasta el año 2009.
  • Peugeot 206: hasta el año 2005.

Tené en cuenta al buscar autos usados baratos que no superen el millón de pesos, al ser un vehículo que tiene más de 10 años de antigüedad y en muchos casos más de 200.000 kilómetros, tendrá que verificarse bien su estado y los papeles.

Peugeot 206 año 2005

Consejos para comprar un auto usado

Finalmente, para adquirir un vehículo usado y que sea una buena inversión, algunas recomendaciones son:

  • Verificar el exterior: chequear el estado general de la chapa y la pintura, el parabrisas, la luneta y los faros. Asimismo, abrir y cerrar todas las puertas, sin olvidar el baúl y el capó y asegurarse que no haya fricciones ni ruidos extraños.
  • Estética y cuidado interior: Una buena práctica es la de sentarse en cada uno de los asientos, subir y bajar las ventanillas, ver el techo y las alfombras. También debes chequear el estado del habitáculo del conductor, ver cómo está el volante, los pedales, los instrumentos y accesorios; así como el cinturón de seguridad y los comandos.
  • Mecánica: es esencial saber si la concesionaria ofrece o no garantía mecánica. De lo contrario, lo ideal es llamar a un mecánico amigo para que pase y revise el auto.
  • Electrónica: también es recomendable realizar un chequeo electrónico completo. Suele ser sencillo y rápido, los mecánicos utilizan un scanner que brinda información valiosa del vehículo.

Por último, algunas preguntas que no podés olvidar son: antes de revisar la mecánica, preguntar por el mantenimiento del auto, dónde se le realizaron los service, cuándo, y qué uso tuvo el auto.

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