El Papa Francisco atraviesa un delicado estado de salud que lo mantiene internado en el Hospital Policlínico Agostino Gemelli de Roma, tras haber sido diagnosticado con una neumonía bilateral.
Este lunes, la oficina de prensa del Vaticano informó que el Pontífice sufrió dos nuevos episodios de insuficiencia respiratoria aguda, atribuidos a una acumulación significativa de moco endobronquial, lo que generó un broncoespasmo.
A pesar de la gravedad del cuadro, destacaron que en todo momento se mantuvo “lúcido y orientado”.
Debido a la complicación respiratoria, Francisco tuvo que ser sometido a dos broncoscopías para la extracción de secreciones, un procedimiento clave para aliviar sus vías respiratorias.
A pesar de este retroceso, desde su entorno señalaron que el Papa logró descansar bien durante la noche y continúa con su recuperación bajo estricta observación médica.
