El Gobierno Nacional, junto con distintas dependencias e incluso el Senado de la Nación, estaría evaluando la posibilidad de adelantar una hora en Argentina con el objetivo de generar un ahorro energético y aprovechar mejor la luz solar.
Esta medida, que ya fue aplicada en otras oportunidades, busca ajustar los relojes en los meses de verano, adelantando la hora a fines de noviembre y atrasándola nuevamente a mediados de marzo.
La última vez que se implementó el cambio de horario en el país fue en el año 2009. En ese momento, la modificación temporal se introdujo como una política de ahorro de energía durante los meses de mayor consumo.
La propuesta actual sigue esa misma línea: adelantar la hora permitiría aprovechar las horas de luz solar para reducir el uso de electricidad, especialmente en la tarde y noche, cuando la demanda energética aumenta significativamente.
En términos técnicos, Argentina utiliza actualmente el huso horario GMT-3, aunque geográficamente debería regirse por el huso horario GMT-4.
Esto significa que el país se encuentra una hora adelantado respecto de su ubicación geográfica, y adelantar una hora adicional en los meses de verano, como lo hace gran parte del mundo, generaría un mayor aprovechamiento de la luz solar.
De avanzar esta propuesta, la medida podría empezar a aplicarse en las próximas semanas, coincidiendo con el comienzo de la temporada estival, y prolongarse hasta mediados de marzo del próximo año, cuando el país volvería a su horario habitual.
