El policía Juan Eduardo Coletti decidió pasar a visitar a su madre que vive muy cerca de su casa en la ciudad de Tucumán y cuando estaba llegando a la vivienda escuchó unos gritos; al ingresar vio a dos delincuentes forcejeando con su progenitora.
El tiroteo empezó cuando un tercer cómplice, que esperaba afuera en una moto, alertó a los agresores de la presencia del efectivo que estaba de civil. Este comenzó a gritar: “¡Es cana, es cana! ¡Matalo, matalo!”.
El policía retrocedió hasta su vivienda y se protegió detrás de un auto. A partir de ese momento el hecho quedó grabado por una cámara de seguridad.
En las imágenes, se puede al efectivo de la policía de Tucumán pedirle una escopeta a su esposa y repeler a tiros los delincuentes.
Según el informe policial, los asaltantes cayeron heridos de las motos y corrieron a esconderse en un descampado. Uno de los malvivientes, de 28 años, sufrió una herida de bala en el abdomen y permanece internado en el hospital con custodia policial.