Este lunes declara ante la Justicia el único detenido tras un allanamiento a un “club de apuestas clandestinas” donde se realizaban crueles riñas de gallo en Florencio Varela.
Se trata del organizador de las apuestas clandestinas, que además es el dueño del lote y alquilaba el espacio en el que funciona la iglesia evangélica Estanque de Siloé, adelante del club.
El domingo 48 hombres que realizaban apuestas fueron aprehendidas allí y trasladadas a sede policial, cuando la Policía Bonaerense allanó el lugar tras la denuncia de los vecinos.
Al fondo, detrás de maderas y chapas, los efectivos encontraron una especie de grada hecha con tres tablones, varias jaulas, una pizarra y el ring en el que se llevaban a cabo riñas de gallos: una pileta pelopincho.
En total, 42 gallos fueron retirados del lugar: las fuentes dijeron que el organizador de las apuestas, que tiene 57 años, declaró que 23 eran de su
pertenencia y que los otros 19 habían sido llevados hasta allí por los apostadores.
Según esas fuentes, al aprehendido se lo señala como autor de los delitos de maltrato animal y de organización de juego clandestino. Desde la policía departamental indicaron que la UFI 5 de Florencio Varela, a cargo de la causa, dispondrá el destino de esos animales, que habitualmente son examinados por veterinarios del área de Bromatología que depende de la municipalidad.
“Les damos maíz y agua y mantenemos las jaulas tapadas porque eso los mantiene tranquilos hasta que se dispone su adecuación en otros lugares”, explicaron las fuentes policiales.
Según fuentes del Ministerio de Seguridad provincial la apuesta mínima era de 500 pesos y se secuestró un total de 30.000 pesos.