Es el caso pediátrico de mayor tiempo de vida con un corazón artificial como puente al trasplante que se conoce en el mundo.
Marianella tiene 9 años y hoy puede sonreir con ganas. Afectada por una miocardiopatía, fue trasplantada con éxito en el Hospital de niños “Juan Garrahan”, y ya se recupera en una sala común del centro de salud. Pero en el medio, vivió 955 días con un corazón artificial, lo que significó el caso pediátrico de mayor tiempo de vida con esa prótesis como puente al trasplante que se conoce en el mundo.
Marianella había sido conectada a un dispositivo de asistencia cardíaca ventricular el 18 de diciembre de 2013 cuando su corazón, afectado por una miocardiopatía, no dio más y debieron colocarle el aparato que le permitió sobrevivir.
Julio, papá de Marianella, habló este mediodía con los medios y se mostró feliz por el resultado de la intervención. “Estamos muy contentos porque le salvaron la vida a mi hija. Después de tres años aquí, en este hospital, no me alcanzan las palabras para agradecer”, señaló.
Los cirujanos Gerardo Naiman y Vogelfang destacaron: “Más allá del logro médico, que lo es, porque los chicos que están con asistencia de corazón artificial requieren muchos controles, un tratamiento anticoagulante que tiene que ser muy efectivo, los problemas de infección que son un peligro permanente, y muchas otras cosas, creo que lo importante acá es destacar la fortaleza que tuvo la familia para sostener con vida Marianella y la fortaleza que tuvo para vivir todo este tiempo en el hospital”.
“Yo dije que no iba a volver a Córdoba si no era caminando de la mano con mi hija, Dios me escuchó y ella va a vivir hasta los 70 años”, afirmó Sandra, la madre.
Infobae
