La pandemia de coronavirus no termina y golpea de la peor forma. En Pergamino, falleció un menor de 13 años por la enfermedad, convirtiéndose en la víctima más joven en todo el país.
Juan Pablo Ortíz, tenía 13 años de edad y perdió la vida a causa del COVID-19. Con él, ya son 287 los fallecidos en Pergamino desde el comienzo de la pandemia.
Juan Pablo falleció el sábado a la noche por un paro cardíaco tras atravesar casi una semana con los síntomas del coronavirus.
Ortíz era un niño con autismo y además convulsivo febril desde bebé, según informó su madre, Ángela Noda, en diálogo con el medio pergaminense “El Tiempo”.
“Él empezó con Covid-19 el domingo 23 a la mañana cuando levantó fiebre. Logramos bajarle la fiebre y se estabilizó y empezó a volver a jugar. De pronto empezó con tos y el viernes a la tarde empezó a levantar fiebre nuevamente. Estuve cuatro horas intentando bajarle la fiebre y no podíamos bajársela. En esas horas estuvimos casi todo el tiempo en la ducha. Recurrimos a un medicamento inyectable para lograr bajarle la fiebre y nos quedamos a la noche sentados porque tenía tos. Era muy gordito Juan Pablo. El sábado se levantó, dentro de todo bien, almorzó y me dijo que se quería acostar”, sostuvo.
“Él estaba como todos los pacientes de Covid-19 con un estado gripal de malestar muscular y cansancio permanente. Se recostó a dormir la siesta y al despertar estaba con fiebre nuevamente. Otra vez nos fuimos a la ducha a tratar de bajarle la fiebre. Era ingresarlo a la ducha para que la temperatura descendiera a 35 o 36 grados y a los cinco minutos ya volvía a estar con 38 grados de fiebre. La última vez que hicimos la maniobra de ducharlo para que bajara la fiebre a 37 grados fue a sentarse a su sillón, en el que siempre se sentaba, y se durmió”, reconstruyó Ángela sobre los últimos minutos de vida que vio a su hijo con vida.
“Me dijeron que hizo un paro cardíaco y que el Covid-19 provoca estos desenlaces principalmente en las personas obesas”, contó.