Este jueves 8 de septiembre de 2022, se confirmó la muerte la Reina Isabel II del Reino Unido a los 96 años. Fue coronada el 2 de junio de 1953, mientras estuvo en el trono. Vio pasar a 15 primeros ministros y 7 papas. Al cumplir 21 años juró: “Toda mi vida, sea larga o corta, estaré dedicada a vuestro servicio”. Hasta el final cumplió a rajatabla su lema.
La muerte de la reina es una noticia de alto impacto en la sociedad británica y el mundo, debido a que la mayoría de los británicos no recuerda haber presenciado la muerte de un rey: el último hombre que murió en el trono fue Jorge VI, hace 70 años.
Operación “London Bridge is down”
El día de la muerte de la reina Isabel se lo denominó como “El Día D“. Comenzará con una serie de llamadas y correos electrónicos a funcionarios y ministros de relevancia, cuyo borrador ya está escrito.
Por teléfono se le indica al primer ministro de Inglaterra que “el puente de Londres ha caído” (London Bridge is down) este mensaje es la confirmación de que la reina Isabel murió.
Luego se notifica a todos los ministros, 10 minutos después todas las banderas de Whitehall -la zona parlamentaria- deberán bajarse a media asta.
Minutos después, los ciudadanos británicos conocerán la noticia a través de una “notificación oficial” emitida por la Casa Real.
A su vez, se anunciará un minuto de silencio a nivel nacional y el Ministerio de Defensa disparará salvas desde diversas ubicaciones.
La primera ministra será el primer miembro del Gobierno en hacer una declaración. Todos los demás miembros del Gobierno tienen instrucciones de no comentar nada hasta después de que ella haya hablado.
La “Operación London Bridge” también incluye un protocolo exclusivo para redes sociales. El color negro bañará los perfiles sociales del gobierno.
“El Día D”
Durante el “Día D”, la primera ministra tendrá una audiencia con quien será su sucesor y asistirá a una ceremonia religiosa en honor a la reina en la catedral de San Pablo, en el corazón de Londres.
El plan también incluye la puesta en marcha de una estrategia de seguridad sin precedentes para gestionar multitudes y evitar el colapso de la ciudad.
Al día siguiente de producida la muerte de la reina Isabel, el sucesor deberá dirigirse a la nación a las 6 de la tarde, mientras que será proclamado soberano a las 10 de la mañana del día siguiente.
Previo al funeral, Carlos, el príncipe de Gales, deberá realizar una gira que comenzará en Escocia y culminará en Gales.
En el segundo día de luto, el féretro con los restos de la Reina retornarán al Palacio de Buckingham.
En el quinto marchará la procesión hacia el Palacio de Westminster, donde permanecerá en una caja elevada y abierta al público hasta el octavo día.
Finalmente, el día “D+10” se celebrará el funeral de estado, se lo declarará festivo y la ceremonia se realizará en la Abadía de Westminster.
Tras el último adiós, su cuerpo será enterrado en una tumba preparada en la cripta real de la capilla de San Jorge, en el castillo de Windsor.