Días pasados, un padre recibió amenazas de una persona, vía telefónica, diciéndole que tenían retenido a su hijo. Los delincuentes le exigieron una cuantiosa suma de dinero a cambio del presunto rescate del joven, cuyos datos filiatorios no trascendieron.
Para hacer más creíble la versión del delincuente, una voz masculina se puso al frente del teléfono simulando ser el hijo de la persona que atendió el teléfono. Esta voz entrecortada pedía ayuda a gritos, simulando también estar sufriendo la tortura de sus supuestos secuestradores.
Desesperada la familia montense, y creyendo que aquella voz era la de su hijo, se propusieron cumplir con las exigencias de los malvivientes, y lograron juntar una abultada suma de dinero, que depositaron en una bolsa colocada en el lugar acordado con los delincuentes.
Desde la Estación de Policía Comunal de Monte se trabaja en distintas líneas investigativas para el esclarecimiento del caso, no descartándose que los delincuentes pudieren haber tenido un contacto local.
Recomendaciones
En primer lugar, tratar de conservar la calma, si bien se encuentra en un estado emocional difícil, no brindar ningún tipo de información sobre la persona a la cual le están haciendo referencia.
Esto le sirve a los autores de la estafa para conseguir mayor información, desconocida por ellos en muchos de los casos.
Además, se solicita no permitir el acceso a gente extraña a su domicilio, ya que esta es una de las modalidades utilizadas para este tipo de hechos.
Por último, se sugiere no dar ningún tipo de información telefónica a persona alguna, e inmediatamente ponerse en contacto con el familiar en cuestión y dar aviso a la Policía.
