El fiscal general de La Plata, Héctor Bogliolo, confirmó que una de las víctimas en San Miguel del Monte tenía una bala en uno de sus glúteos. El dato confirma que la policía disparó contra el auto, donde también se habría encontrado un orificio.
“Dispararon hacia el vehículo. Ahora se está periciando nuevamente el auto, que está destrozado y aparentemente tendría un orificio”, aseguró en radio La Red. “Se investiga como homicidio, yo diría que sí, hay que ver qué opina el fiscal de primera instancia”, agregó el funcionario.
“Vamos a ver qué es lo que surge (de la investigación), habría que esperar porque hoy se hacen las pericias sobre las armas. Dadas las circunstancias, a mi criterio, excede el ámbito del homicidio culposo”, aseguró Bogliolo, quien adelantó que ya cuentan con varios elementos para poder avanzar y determinar qué ocurrió. Sostuvo que por lo que se sabe hasta ahora, las cinco personas que viajaban en el vehículo no mostraron ninguna actitud sospechosa. Según dijo, simplemente estaban cantando y mostrándose “alegres”.
“Hay muchísimas grabaciones y elementos suficientes para poder reconstruir las circunstancias que rodearon a este hecho tan trágico. En las filmaciones que tenemos de lo que ocurre dentro del vehículo, los chicos estaban muy contentos, cantando y demás. Evidentemente la Policía dice que no respondieron a la voz de alto, pero si eso hubiese ocurrido los chicos no creo que hayan llegado a escuchar por la manera en la que estaban cantando”, reveló Bogliolo. En ese sentido, aclaró que en caso de que cualquier sospechoso no responda a la voz de alto durante la persecución, “no amerita el uso de arma de fuego de ninguna manera”.
Otro dato confirmado por el fiscal general y que puede dar un giro importante en la investigación es que los médicos sacaron un proyectil de arma de fuego de una de las víctimas. “Sí, lo encontraron en el glúteo de uno de los chicos en dirección a la pelvis. Está confirmado que dispararon”, señaló Bogliolo.
Aunque en un principio trascendió la información de que se trataba de una de las nenas que iban en el auto -Camila López, que falleció, y Rocío Guagliarello, que está internada en grave estado-, Yanina Zarzoso, madre de Camila, indicó a Infobae que el cuerpo de su hija no presenta ninguna herida de bala.
El procurador de la provincia de Buenos Aires, Julio Conte Grand, confirmó también que es uno de los varones quien recibió el disparo, pero que en principio no será revelada su identidad por respeto a las familias.
Bogliolo dijo también que se está periciando el vehículo destrozado por el choque y que la carátula inicial sería homicidio culposo, aunque aclaró que todavía no existe una calificación completa que permita pedir la prisión preventiva de los efectivos policiales, que ya fueron identificados.
“A pesar de los años y de los distintos hechos por los que uno ha atravesado en la experiencia cotidiana, siempre esto produce una sensación muy fea por decirlo de alguna manera. Son criaturas. Es tremendo estar en los zapatos de los papás. Debe ser una experiencia dolorosísima; lo que es para mí que no tengo vínculo con los chicos, me imagino que el papá debe estar destrozado”, lamentó.
En el violento episodio del lunes, tres menores y un joven de 22 años murieron luego de que el auto en el que viajaban se estrellara contra un camión cuando era perseguido por la Policía. Tras la denuncia de los familiares, se inició una investigación y se determinó no solo que el vehículo fue baleado sino que uno de sus ocupantes recibió un impacto de bala. Por lo pronto, la Policía bonaerense separó preventivamente a los oficiales involucrados.
Gonzalo Domínguez (14), Camila López (13) y Danilo Sansone (13), todos oriundos de San Miguel del Monte, junto a Aníbal Suárez, nacido en Misiones, (22) quien manejaba el auto, perdieron la vida prácticamente en el acto. La policía dijo que murieron mientras eran llevados a un centro de salud. En tanto, Rocío Guagliarello (13), que también estaba en el vehículo, sobrevivió pero está internada en grave estado en el Hospital de Alta Complejidad El Cruce de Florencio Varela. El caso es investigado por el fiscal Lisandro Damonte.
Los cuatro menores eran amigos, se conocían porque compartían clases en la Escuela Media de San Miguel del Monte y, de acuerdo con lo que contaron sus familiares, solían juntarse en la zona de la costanera en su tiempo libre para rapear y andar en skate. Aníbal, por su parte, era primo de otro de sus compañeros de colegio.