En medio de una creciente disputa con el gobernador chubutense Ignacio Torres, Javier Milei avanza con medidas que generan enfrentamientos con los gobernadores provinciales.
El Gobierno Nacional ha abierto un nuevo foco de conflicto al eliminar el Fondo para el Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires, enviando un claro mensaje a la administración de Axel Kicillof.
A través del Decreto 192/2024, publicado hoy en el Boletín Oficial y firmado por el Presidente, el jefe de Gabinete, Nicolás Posse, y el ministro de Economía, Luis Caputo, se dispuso un recorte casi total al Fondo Fiduciario que administran los movimientos sociales. Este fondo fue creado durante la gestión de Alberto Fernández, en plena pandemia, mediante la quita a la Ciudad Autónoma de Buenos Aires de un porcentaje de los fondos correspondientes a la coparticipación federal.
La medida, que anteriormente había causado conflictos entre Casa Rosada y el entonces jefe de Gobierno porteño, Horacio Rodríguez Larreta, se anunció tras una protesta policial por mejoras salariales contra la gestión de Kicillof. En aquel momento, justificó la medida, señalando: “Tenemos que buscar recursos en una situación fiscal complicada. Estamos derivando muchos recursos del Estado a los sectores más desprotegidos”.
El decreto argumenta que “la severidad de la crisis pone en riesgo la subsistencia misma de la organización social, jurídica y política constituida, afectando su normal desarrollo en procura del bien común”. También destaca la necesidad de un ajuste fiscal para superar la herencia institucional, económica y social crítica recibida por el actual Gobierno.
En un aumento de la confrontación con Kicillof, el Gobierno de Milei expresó que “el mencionado Fondo de Fortalecimiento Fiscal de la Provincia de Buenos Aires afectó los intereses generales de la Nación en su conjunto”, justificando la eliminación del mismo.
Este movimiento se produce después de que Kicillof exigiera el “inmediato pago del saldo adeudado por los meses de noviembre y diciembre del año 2023 y enero de 2024”. La tensión política entre el Gobierno central y las provincias parece aumentar, marcando un escenario de fuertes disputas en el ámbito político y económico del país.
