Después de 84 días de confinamiento para evitar la propagación del coronavirus (Covid-19) el jueves pasado Mar del Plata habilitó las salidas recreativas de una hora, en el horario de 8 a 20, circunscriptas a 500 metros del municipio y sin poder acceder a playas y parques.
En ese sentido, se preveía que este domingo el “permitido” pase su prueba de fuego. Si bien en general se respetaron las medidas de distanciamiento y precaución, un “picadito” en el barrio Pueyrredon donde se juntaron cerca de 400 personas encendió las alarmas en el distrito costero.
“Así no. El primer domingo de salidas recreativas en Mar del Plata mostró imágenes preocupantes. Estoy a favor de la apertura progresiva, pero no de esta manera. Es fundamental actuar con responsabilidad. Y es muy importante que haya controles”, objetó el ex diputado provincial Rodolfo “Manino” Iriart.
En ese marco, el marplatense acompañó sus posteos en las redes sociales de imágenes del paseo costero de “La Feliz” con algunas aglomeraciones y gente incumpliendo las medidas de precaución. “Se vieron personas que no cumplían el distanciamiento social y/o no llevaban mascarillas”, criticó.
Párrafo seguido el ex legislador expuso un video en donde se ve un partido de fútbol en el que había reunida gran cantidad de gente, autos y motos. “En el barrio Pueyrredón se armó un picado de fútbol con público incluido. Alrededor de 400 personas circularon por el lugar. De no creer. Un peligro”, señaló.
La preocupación no es menor si se toma en cuenta que algunos focos de contagios en la provincia tuvieron como desencadenante un partido de fútbol clandestino. Por caso, en Villa Azul, barrio popular de Avellaneda y Quilmes, y en el Barro Rovello de Mercedes, ocurrió eso.
En las últimas horas del domingo la secretaría de Salud municipal confirmó un nuevo caso positivo de COVID-19 en Mar del Plata, de una mujer de 30 años que había viajado a Bolivia, y de esta manera son cuatro las personas que se encuentran en tratamiento en la ciudad.
El caso fue detectado cuando la trabajadora, residente del Hospital Interzonal de Agudos (HIGA) de la ciudad, quiso ingresar a la ciudad y en el retén se activó el protocolo especial para personal sanitario.