Con acusaciones de haber sido metido por la ventana, Mauricio Macri apeló el procesamiento que el juez Martín Bava le dictó el miércoles pasado por haber ordenado el espionaje sobre los familiares de los 44 tripulantes del submarino ARA San Juan. El expresidente también impugnó la decisión del juez de prohibirle la salida del país y el embargo por 100 millones de pesos que también le impuso.
El defensor de Macri, Pablo Lanusse, presentó un escrito de 71 fojas en el que sostiene que Bava “ingresó por la ventana” al expresidente en la causa el 1 de octubre pasado en pleno proceso electoral. La apelación de Macri fue virulenta con el juez e incluso llegó a deslizar que la resolución de la semana pasada podría no haber sido escrita por él, sino por un “inaceptable ghostwriter” (escritor fantasma)
La investigación por las tareas ilegales desplegadas por la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), desde su delegación Mar del Plata, se inició el 23 de septiembre del año pasado con la denuncia que formuló la interventora de ese organismo, Cristina Caamaño. En la presentación de Caamaño, Macri estaba señalado como uno de los responsables.