“La pista está tratada pero no hay visibilidad”, indicaron desde el aeropuerto de Bariloche en diálogo con este medio. A pesar del trabajo realizado la cantidad de nieve dificulta el despegue y el aterrizaje de las aeronaves.
Gustavo Steinman hace tres días que duerme en esa estación aérea esperando que reprogramen su vuelo para poder volver a su casa en Rosario. “Hay chicos durmiendo en el piso y acá y una gaseosa te la cobran $ 70. Una familia llega a gastar $ 1.000 para comer algo”, relató.
Además, contó que los dueños de los hoteles aprovechan la complicada situación y elevaron sus tarifas: “Te piden desde $ 2.000 a $ 14.000 para pasar una noche”, graficó.
Lo cierto es que la empresa Aerolíneas Argentinas comenzó a operar los primeros vuelos anoche y se estima que durante este domingo, de acompañar clima favorable, volverá a operar normalmente.
La Administración Nacional de Aviación Civil (Anac) expresó que el aeropuerto de Bariloche tiene una acumulación de nieve de hasta 50 centímetros y la pista de la terminal Chapelco, dónde ya se despejaron 40 centímetros de nieve, presenta heladas.