Funcionarios de la Justicia de Dolores creen que la fatal disputa que mantuvieron Graciela Noemí Funes y su pareja, el efectivo policial Franco Mauricio Torres, se habría originado debido a que la mujer descubrió que el sujeto intentaba abusar sexualmente de su hija, una chica 14 años. Durante el hecho que tuvo lugar en General Madariaga, el oficial mató a víctima y posteriormente se suicidó.
El femicidio ocurrió en los primeros minutos de esta madrugada y ahora los funcionarios judiciales investigan si Torres, quien se desempeñaba en el área de Inteligencia de Pinamar, quiso violar a la joven menor de edad.
Al respecto, se cree que el testimonio de la adolescente sería fundamental para esclarecer el hecho, ya que ella habría estado presente dentro de la casa ubicada en Arias y Fray Justo Santa María de Oro, cuando el individuo, de 24 años, consumó el crimen con su pistola 9 milímetros, para después quitarse la vida.
Hasta el momento, las diversas pruebas que obran en el expediente penal sostienen que la jovencita habría tomado el arma y la habría colocado sobre una mesa, donde, posteriormente, fue incautada por los peritos de la Policía Científica, quienes también observaron que el cadáver de Funes, de 41 años, presentaba al menos tres certeros impactos de bala en la región del estómago y que otro de los proyectiles se incrustó en una heladera, en la cocina del mencionado domicilio.
Walter Mércuri, fiscal de la Unidad Funcional N° 8 de General Juan Madariaga, que interviene en la causa, no encontró denuncias de violencia de género radicadas en contra de Torres por parte de Funes.
Este nuevo caso de femicidio ocurre a menos de un mes del crimen de Úrsula Bahillo, de 18 años, quien fue asesinada de 15 cuchilladas el 9 de febrero pasado por su ex novio, otro efectivo policial, Matías Ezequiel Martínez, de 24 años, en la localidad bonaerense de Rojas.