El gobernador Axel Kicillof expresó su preocupación por el cierre de oficinas del Correo Argentino, especialmente en el interior de la provincia de Buenos Aires, al señalar que esta medida “contribuye a aislar” localidades y perjudica la logística electoral.
“Es muy grave el desmantelamiento del Correo que está ejecutando Milei en muchos pueblos de la Provincia. Como cuando los gobiernos que admira cerraron el ferrocarril, contribuye a aislar al interior. Pero también preocupa mucho el efecto sobre los actos electorales”, afirmó Kicillof en su cuenta de X.
Kicillof compartió una nota del periodista Raúl Kollman para el diario Página 12, donde se destaca que “los 5.000 despidos y retiros voluntarios en el Correo Argentino impedirían, hoy por hoy, organizar el voto de los ciudadanos”.
El Correo Argentino es una de las nueve empresas públicas que el Gobierno de Javier Milei pretende privatizar si se aprueba la Ley Bases en el Congreso de la Nación. Desde principios de mayo, la administración de Milei inició un plan de retiros voluntarios y jubilaciones anticipadas para reducir la plantilla de 16.858 empleados a casi la mitad, dejando solo 9500 trabajadores.
El cierre de estas oficinas también afectará el proceso electoral, ya que el Correo distribuye las urnas, materiales de votación, traslada los padrones, las boletas de los partidos y las planillas de recuento. Además, gestiona el retiro de urnas con votos, el voto por correo, incluyendo los del extranjero, y el recuento provisional de votos la noche de las elecciones.
