Desde que se inició la cuarentena obligatoria decretada por el gobierno, uno de los problemas que más visibilidad tuvo fue la falta de cigarrillos ante el parate total en la producción, situación que llevó a que los fumadores hagan lo que sea para conseguir un atado de “puchos”.
En ese sentido, se dio una situación realmente insólita en los santuarios del Gauchito Gil en Comodoro Rivadavia. Allí, los vecinos denuncian la falta de cigarrillos que les dejan como ofrenda tradicional.
Los devotos del Gauchito Gil se acercan a estos altares, generalmente ubicados a los costados de las rutas o caminos, prenden una vela y le dejen cigarrillos y bebidas alcohólicas, antes de pedirle un favor y protección.
Muchas fieles suelen dejar un cigarrillo, puede estar prendido o no, o paquete junto a una vela encendida.
Según reportó el Diario Crónica, varias personas han robado los atados y dejaron las colillas encendidas en los lugares de culto.