Un hecho sin precedentes sacudió el Concejo Deliberante de Lezama cuando dos concejales protagonizaron una violenta pelea al término de la sesión celebrada en la noche del jueves.
El altercado, que involucró a Roberto Palacios, del GEN e integrante del oficialista Frente Juntos por Lezama, y a Lucas Iturri, del PRO, ha generado un fuerte repudio debido a la gravedad de los hechos ocurridos en el recinto legislativo.
Aunque las autoridades del Concejo no han emitido un comunicado oficial, trascendió que la discusión entre Palacios e Iturri comenzó al finalizar la sesión, con un intercambio de opiniones en tono elevado. La confrontación verbal escaló rápidamente hasta derivar en una pelea física, un hecho que desató el asombro de los presentes. Ambos ediles fueron separados por otros concejales, quienes intentaron controlar la situación.
El origen del conflicto parece estar vinculado a un pedido de informes presentado por Iturri al Ejecutivo municipal, que no había recibido respuesta. El concejal del PRO insistió con un nuevo proyecto para reiterar dicho pedido, pero no contó con el respaldo del bloque oficialista, lo que habría desatado la ira entre los involucrados.
Las denuncias fueron radicadas en la Estación de Policía Comunal de Lezama, y la investigación está a cargo de la UFI N° 10 del Departamento Judicial de Dolores, con sede en Chascomús, a cargo del fiscal Jonatan Robert.
A pesar de la magnitud del incidente, hasta el mediodía del viernes ninguno de los bloques políticos implicados ni la Presidencia del Concejo se han pronunciado oficialmente sobre lo sucedido. Se espera que en las próximas horas se emita algún comunicado para aclarar los hechos y calmar la situación en un contexto político ya tensionado.
Este episodio ha puesto en evidencia la falta de control y mesura en un espacio que debería ser un ámbito para el debate de ideas, dejando en claro que la violencia no puede ni debe ser parte de la discusión política.
