El Papa Francisco, a través de una carta para el Arzobispo de La Plata, Monseñor Víctor Manuel Fernández, se refirió a la realidad política del país y apuntó contra la violencia. El Pontífice también agradeció por un acto realizado la última semana en la Capital Bonaerense.
“Hay mucho por hacer en Argentina, para que todos puedan vivir de la dignidad del trabajo y para que no haya ciudadanos de segunda. Pero nada importante ni estable se logrará con la polarización agresiva”, manifestó Francisco.
“Me consuela el alma que mi persona haya hecho posible ese momento de comunión, de encuentro más allá de las diferencias”, afirmó en referencia a la reunión que mantuvieron Dirigentes Oficialistas y Opositores para celebrar sus 10 años como Papa.
“A veces estas pequeñas ‘treguas’ impiden que sigan avanzando la violencia y los enfrentamientos. Eso nunca hace bien a un país y termina lastimando sobre todo a los que más sufren”, fueron sus palabras.
El Papa Francisco también destacó la presencia de “sectores de todos los colores de la política, otras confesiones religiosas, personas de la educación, de la cultura, de la empresa y de la justicia, junto a los trabajadores más humildes y los pobres que caminaron como movimientos sociales, sostenidos por su fe y llevando a La Virgen y a San Cayetano”.
Finalmente, desestimó una eventual visita a Argentina, al menos en el corto plazo. “Ahora tengo una deuda con todo el mundo y me falta visitar muchos países grandes, especialmente algunos que nunca recibieron la visita de un Papa”, concluyó.