Ante la imposibilidad de volver a una cuarentena estricta por sus consecuencias económicas y sociales, y ante la dificultad a nivel mundial para conseguir vacunas contra el coronavirus, el Gobierno nacional definió este viernes diferir hasta la semana 12 la aplicación de las segundas dosis para acelerar el plan de vacunación.
Así lo resolvió el Consejo Federal de Salud, que encabeza la ministra del área a nivel nacional, Carla Vizzotti, y del que participan todos sus pares provinciales y de la Ciudad de Buenos Aires.
Con la premisa de que abril marcará el comienzo de una nueva etapa de incrementos de contagios en todo el país, la medida afectará a todas las vacunas que se están utilizando para combatir al Covid-19 desde fines de diciembre pasado.
Antes del encuentro Vizzotti explicó que esta iniciativa no tiene que ver con que haya menos vacunas, sino que apunta a “diferir la segunda dosis, como lo están haciendo Canadá y el Reino Unido que ya vio una disminución del 90% del contagio y de la mortalidad con esta estrategia”.
“Si la diferimos unos meses (la segunda dosis) cubrimos más rápido a más personas para cumplir con nuestro objetivo que es bajar la mortalidad y luego se puede organizar todo el programa de vacunas para dar la segunda dosis”, explicó la funcionaria en declaraciones radiales.
La Ministra explicó que la intención es que rija “el principio de equidad para que reciban la primera dosis la mayor cantidad de personas posibles”. “Las segundas dosis, tienen un porcentaje para aumentar la eficacia de la primera, sobre todo para que dure más tiempo”, remarcó.-