Julieta Rossi sostuvo que tanto ella como la familia buscan que el crimen del joven se haga justicia.
El crimen de Fernando Báez Sosa a la salida de un boliche en Villa Gesell a manos de un grupo de rugbiers conmocionó al país. El joven tenía 18 años y se había inscripto en la Facultad de Derecho de la UBA para comenzar la carrera en los próximos meses.
Una enorme cantidad de vecinos tanto de la Ciudad de Buenos Aires así como de Zárate, localidad de donde son oriundos los acusados, se movilizaron para pedir justicia por el brutal asesinato.
En una entrevista con el programa Crónicas de una tarde, que conduce Mónica Gutiérrez, Julieta Rossi, quien era la novia de Fernando, brindó un conmovedor relato en el que aseguró que no busca venganza, pero sí “justicia”.
“Mi familia y mis amigos están siempre. Me mandan mensajes, me acompañan a pegar carteles. Estuvimos pegando por Corrientes, Florida, Callao, Recoleta, Flores, Caballito y ahora vamos a seguir. Es lo menos que podemos hacer, ¿no? Y es lo único que puedo hacer desde mi lugar. Si tengo que quedarme en mi casa sin hacer nada, me muero”, relató.
Y agregó: “Yo voy todos los días a ver a Fer y le llevo flores. Lo que viví, ya lo viví y mi intención no es olvidarlo porque no le puede pasar a otra persona. Tratamos de no pensar, pero es imposible”.
Asimismo, la joven contó que se encuentra en contacto con los padres de Fernando y aseguró que están “como pueden”.
“Era su único hijo, la única persona que tenían en su casa, a la que esperaban con la comida todos los días, a la que saludaban antes de irse a dormir. Ahora ya no está, ya nadie entra por la puerta más que ellos dos“, concluyó.