Ante la escalada inflacionaria, la Provincia admitió que no podrá seguirle el ritmo a la inflación y planteó alternativas a los Gremios Docentes Bonaerenses en la discusión por paritarias. El Gobierno provincial ofreció un 20%. Los sindicatos pidieron por una “reducción de la jornada laboral, de 40 a 30 horas semanales. Es decir, 6 horas diarias.“
También circuló la idea de una moneda provincial o bono como otra forma de compensación. Mientras los gremios mantienen abiertas las negociaciones, tanto la cifra ofrecida como la reducción horaria encuentran cierta resistencia entre las bases.
La próxima reunión está pactada para mañana jueves por la tarde. Se espera que, por la positiva o por la negativa, los sindicatos y la Provincia lleguen a un acuerdo. De no mediar acuerdo alguno, la posibilidad de que la Paritaria se cierre por decreto no ha sido descartada.
La situación económica golpea el bolsillo de todos los trabajadores del País, y si bien las paritarias docentes bonaerenses se han ido cerrando estos años sin problemas, pareciera que esta vez podría ser diferente.