El Intendente de Zárate, Osvaldo Cáffaro creó en su distrito una suerte de cuasi monedas y las las llamó estampillas, equivalen a $100 y sirven para comprar alimentos y artículos de limpieza. .
El decreto 259, publicado en el Boletín Municipal del 8 de abril, precisa que el Gobierno apela a una ordenanza fiscal que permite aceptar “bienes y servicios” como pago de “tributos vencidos o a vencer”.
De esta manera, quienes reciban la denominada “estampilla” podrán comprar alimentos y artículos de higiene y limpieza que serán facturados a nombre del municipio. El comerciante presentará las facturas y las estampillas, cuyo valor será tomado a cuenta de deudas tributarias.
“Es una letra de cambio, tiene valor nominal, es al portador. Es muy riesgoso porque tendría circulación y funcionaría como una cuasimoneda”, advirtió Marcelo Matzkin, presidente del bloque de concejales de Juntos por el Cambio. Y agregó: “Además, si lo hace un municipio, lo van a hacer todos”.
El decreto que lleva la firma de Cáffaro y del secretario de Gobierno, Juan Manuel Arronquigaray, es del 8 de abril pero recién estuvo en manos de los miembros del Concejo Deliberante este lunes, después de un pedido de informes, debido a que el municipio no publica sus boletines.
Según destaca el documento, la medida ayudará “a paliar la situación de emergencia alimentaria y sanitaria de las familias zarateñas que más lo necesitan, entre quienes se distribuirán las estampillas alimentarias de compensación de tributos para que puedan intercambiarlos por determinados bienes en los comercios especificados y con deuda tributaria”.
Entre las irregularidades que denuncian desde la oposición, señalan que el Gobierno municipal obliga al comerciante a realizar la factura a un tercero (el municipio).
“El comerciante emitirá por la compra un ticket y/o factura a favor de la Municipalidad de Zárate, y los conservará junto a las estampillas de respaldo de la operación , ya que dichos elementos serán necesarios para efectuar la rendición ante la secretaría de Desarrollo Humano y Promoción Social, quien será la encargada de observar y validar la efectiva contraprestación en especie”, señala el boletín.
También se cuestiona que, según precisa el boletín, es un mecanismo de cancelación de deuda con el municipio, pero en este caso se incluye a terceros: “Acá va a haber papelitos al portador”, enfatizan.
“Además, cuando empiece a circular perderá valor y hasta podría generarse un mercado paralelo”, alertan desde el bloque opositor.
Funcionarios municipales negaron que se trate de una letra de cambio y explicaron que “las estampillas son parte de un programa llamado Huella Solidaria”. Según señalaron, una de las medidas para evitar su circulación será darle un listado a los comercios con los nombres de los beneficiarios.
También precisaron que “la editorial que las imprime le pondrá estándares de seguridad para evitar la falsificación”.
“Esto es una emisión encubierta de una cuasimoneda donde el municipio de Zárate no especifica un monto limite y no cumple con las disposiciones del código civil y comercial para la emisión de letras. No hay medidas de registración y seguridad necesarias”, insistieron las críticas desde Juntos por el Cambio