Ayer el Gobierno confirmó que son 17 en total los casos de coronavirus en la Argentina y que ninguno de ellos es autóctono, aunque hasta el momento es el único país latinoamericano donde ha habido una muerte por dicha enfermedad.
“Yo creí que iba a llegar más tarde, no creí que iba a llegar antes de terminar el verano, pero igual trabajamos e hicimos todo lo que teníamos que hacer”, dijo ayer el Ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, en una entrevista periodística.
Ante la situación mundial que implica la posibilidad de ingreso a nuestro país de más personas infectadas y por ende la eventual generación de casos autóctonos, las autoridades difundieron las recomendaciones necesarias para la detección temprana y control de pacientes con posibilidad de presentar una enfermedad respiratoria aguda al ingreso a nuestro país.
La principal estrategia es la detección temprana y control de los casos posibles en los aeropuertos, aunque según informó un lector de INFOZONA, tales controles no son lo suficientemente eficaces como se supone deberían serlo.
Relató que en la víspera acudió al Aeropuerto Internacional de Ezeiza a buscar a una amiga que llegaba de un vuelo proveniente de España y cuando arribó, ésta le comentó que en el interior del avión le entregaron una planilla para completar la declaración jurada, suponiendo que al descender debería pasar por exhaustivos controles, habida cuenta la cantidad de casos registrados en Europa, pero para su sorpresa nada de ello ocurrió.
Dijo la ciudadana argentina que solamente le preguntaron de donde provenía y la hicieron pasar sin siquiera tomarle la temperatura, quedando asombrada por la falta de controles específicos, máxime que se había hecho saber sobre la existencia de un Protocolo denominado “Planes de Contingencia” en el marco de la situación de epidemia mundial por el coronavirus.
Tal protocolo prevé que aeropuertos, puertos y terminales de transporte colectivo terrestre deben tener incluido en su plan de contingencia la operatoria para el auto-reporte del eventual caso sospechoso, su entrevista y su aislamiento, así como sobre sus contactos estrechos y los contactos de bajo o medio riesgo, el lugar de la terminal remota para su ubicación, las medidas de desinfección del medio de transporte y la disposición final de los residuos derivados de la misma.
Pero, al menos en el caso especificado por el lector, dicho protocolo no fue implementado.