Confirman el primer caso autóctono de dengue en la provincia de Buenos Aires

Francisco Díaz

El Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires reportó el primer caso autóctono de dengue del año, confirmado por laboratorio y correspondiente al serotipo DEN-1, en un hombre de 32 años residente en el partido de La Matanza.

El paciente, quien no registra antecedentes de viaje, comenzó a presentar síntomas el 14 de octubre, incluyendo fiebre, dolor de cabeza, malestar ocular y sarpullido, aunque no requirió internación.

Tras la detección del caso, el equipo de Salud provincial, dirigido por Nicolás Kreplak, implementó controles en el domicilio del paciente y en su entorno, realizando una búsqueda activa de personas febriles para contener posibles contagios en la zona.

Desde junio, la provincia de Buenos Aires solo había registrado casos aislados de dengue en personas que viajaron a países con circulación activa del virus, como México, Brasil y Cuba. Este caso autóctono destaca la importancia de las medidas preventivas, especialmente al inicio de la temporada de altas temperaturas, que favorecen la reproducción del mosquito Aedes aegypti, vector del dengue.

Medidas de prevención contra el dengue

El Aedes aegypti se reproduce en recipientes con agua, y sus huevos pueden sobrevivir en condiciones secas hasta por un año. Por ello, el Ministerio de Salud recomienda:

  • Eliminar criaderos potenciales: Realizar tareas de descacharrado, descartando objetos que acumulen agua (como latas, botellas, neumáticos y macetas).
  • Recipientes útiles: Vaciar y dejar boca abajo los baldes y palanganas para evitar que junten agua.
  • Limpieza de canaletas: Mantenerlas libres de hojas durante todo el año.
  • Tapar tanques y barriles que contengan agua.
  • Cambiar frecuentemente el agua de bebederos de animales y floreros, tanto en el interior como en el exterior de las casas.
  • Colocar mosquiteros en puertas y ventanas, y aplicarse repelente, especialmente en actividades al aire libre.


Estas recomendaciones buscan reducir la proliferación del mosquito y proteger a la población ante la llegada del verano, cuando el riesgo de contagio aumenta significativamente.

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