Cinco ladrones entraron a robar anoche en una casa del partido de Moreno, en el Oeste del Gran Buenos Aires. Allí se encontraron con un chico de 13 años que se defendió a los tiros y mató a uno de los asaltantes.
Según informaron fuentes del caso a la agencia Télam, el menor estaba en su dormitorio y observó que su madre era metida a los empujones hacia el interior de la propiedad por varios desconocidos que llegaron en un auto Chrysler Voyager, todos armados con ametralladoras, chalecos antibalas y reclamando la entrega de dólares y dinero en efectivo.
El chico tomó una pistola 9 milímetros de los padres y enfrentó a los delincuentes a los tiros. Uno de los asaltantes recibió dos balazos en una de las axilas y cayó muerto en el patio. Sus cómplices escaparon en el auto en el que habían llegado, sin concretar el robo. Ese coche -que había sido robado en Merlo- fue hallado abandonado a diez cuadras, en la zona céntrica de Moreno.
Los investigadores del caso consideraron que el menor actuó en “una clara legítima defensa”.
