En la antevíspera, se cumplieron 38 años de una tragedia que le costó la vida a dos Bomberos Voluntarios de la ciudad de Chascomús y por extensión a la familia bomberil de toda la zona.
Corría el año 1.985, por entonces era Presidente de la Nación el Dr. Raúl Alfonsín y había concurrido a la estancia “La Encarnación” de la familia de su amigo personal Alfredo Bigatti.
En horas de la tarde de ese caluroso domingo, concurre al lugar una dotación de Bomberos Voluntarios de Chascomús a fines de prestar colaboración en tareas de prevención en el despegue del helicóptero que trasladaba a Alfonsín hacia Olivos, pero al dirigirse al lugar vuelca la unidad autobomba en la que se dirigían al establecimiento rural y pierden la vida dos Bomberos Voluntarios.
Se trataba de los Bomberos Voluntarios José Ulises Beroy y de José Luis Aldabe.
La Asociación de Bomberos Voluntarios de Chascomús erigió en el camino rural que conduce a la estancia “La Encarnación” un monumento en memoria de estos dos servidores públicos que perdieron la vida en cumplimiento del deber.
Ambos bomberos, dedicados y apasionados por su labor, dejaron un impacto indeleble en la ciudad de Chascomús. Sus nombres quedaron grabados en los corazones de todos los chascomunenses, recordándonos la importancia de reconocer y valorar el sacrificio de aquellos que dan sus vidas por el bienestar de los demás.
