El moto vehículo había sido sustraído de una casa de Las Heras y Castelar y la víctima del despojo expresó sus sospechas acerca de adónde estimaba podía encontrarse la moto aunque no pudiendo identificar al o los autores del ilícito, indicando un domicilio al que se dirigió la Policía estableciendo que efectivamente se encontraba la misma, recuperándola para restituirla a su propietaria.
En cuanto al celular pudo determinarse quien podía haber sido el autor del ilícito a través de las cámaras de seguridad del municipio, requiriéndose una orden de allanamiento para un domicilio de Rico 430, en el que efectivamente encontraron el celular que fue entregado a sus legítimos propietarios.