La Planta de Tratamiento de Residuos de Castelli es modelo en la región y lleva 12 meses de funcionamiento. Allí los operarios se encargan de seleccionar material que pueda ser recuperado y vendido, y de esta forma se reduce la cantidad de basura en la ciudad.
Desechos como papel, plástico, cartón, telgopor, telas, latas y vidrio ya no son basura contaminando el ambiente de nuestro distrito. 125.000 kilos de estos materiales se transformaron en recursos gracias al aporte de cada vecino separando en origen estos elementos y permitiendo la obtención de material de mayor calidad. Para tomar dimensión de lo que esta cifra significa, podemos decir que es el equivalente a 93 automóviles.
El proyecto de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos apunta además a la educación, la difusión y la concientización sobre el cuidado del medioambiente.