Uno de los abogados de la madre de Facundo Astudillo, cuyos restos fueron encontrados el 15 de agosto último en un cangrejal de la localidad bonaerense de General Daniel Cerri, calificó de “muy extraño” el hallazgo de la mochila del joven.
Según el letrado, se trata de una zona “hiper rastrillada” por la Policía Federal. Además, de la mochila se hallaron dos cierres y los dos celulares del joven que había desaparecido el 30 de abril.
“Está a más o menos a unos quinientos metros de las vías, previo al ingreso al cangrejal. Y a nosotros nos parece un resultado muy extraño porque ése lugar ha sido rastrillado muchísimas veces “, señaló Luciano Peretto.
El abogado sembró sospechas e insistió en que se trata de “un lugar híper rastrillado en el marco de la inexplicable hipótesis del accidente, por lo que estos hallazgos no son casuales”.
El hallazgo estuvo a cargo de un pescador de la zona y “la levanta porque el lugar se estaba empezando a inundar ya que había subido la marea”, tras lo cual, “se la lleva al domicilio y cuando ve los objetos llama a la Policía Federal”.
“Concordaría con las características de la mochila de Facundo. Tiene dos celulares dentro: un Blackbaerry y un Nokia, que son los dos teléfonos que Facundo transportaba con él”, explicó el letrado.
En ese contexto, Peretto agregó que “nos resulta muy extraño que aparezcan los dos celulares adentro de esta mochila” porque “su madre nos dice que su hijo llevaba los celulares en los bolsillos siempre”.
Los dos celulares fueron remitidos directamente a la Dirección General de Investigaciones y Apoyo Tecnológico a la Investigación Penal (Datip) de la Procuración ya que es “muy importante” el material que podrían contener sobre “las últimas horas de vida”.
En principio es una mochila del mismo color que la que llevaba Facundo, pero no es marca Wilson como siempre se dijo. El hallazgo se produjo cuatro días después de que Cristina Castro declaró por primera vez en la causa que investiga la muerte del joven.
Cristina declaró ante los dos fiscales que se sumaron semanas atrás a la investigación del caso Andrés Heim, de la Procuraduría de Violencia Institucional (Procuvin); y Horacio Azzolin, jefe de la Unidad Especializada en Ciberdelincuencia (Ufeci).
La mujer hizo un relato pormenorizado desde el momento en que denunció la desaparición hasta que se encontró el cadáver y, reiteró sus críticas públicas contra el accionar del personal de la Policía Bonaerense y el fiscal federal Santiago Ulpiano Martínez.
En tanto, también esta semana un trabajador portuario aseguró haber visto luces de tres o cuatro vehículos sospechosos la noche del pasado 11 de agosto en la zona donde cuatro días después se encontraron los restos del joven.
Facundo Castro (22) fue visto con vida por última vez el 30 de abril último, cuando en plena cuarentena por la COVID-19 dejó su casa de Pedro Luro para ir a Bahía Blanca a ver a su exnovia.
En el trayecto fue detenido en, al menos, un control policial por violar el aislamiento, aunque se lo dejó continuar y, según cree su madre, tras ello fue desaparecido por policías bonaerenses que finalmente habrían arrojado sus restos en el cangrejal.
