Ocho municipios de la región Sudoeste de la provincia de Buenos Aires, terminaron el proyecto del programa Turismo Seguro, una novedosa iniciativa que muy pronto estará sobre el escritorio del gobernador Axel Kicillof y que apunta a reactivar poco a poco la actividad, una de las que más ha sufrido la falta de trabajo (e ingresos) por efecto de la pandemia de coronavirus.
El plan contempla, en líneas generales, el intercambio de turistas únicamente entre los municipios de Tornquist, Adolfo Alsina, Coronel Suárez, Patagones, Saavedra, Puan, Coronel Dorrego y Coronel Pringles, todos ellos, con pocos o ningún caso de coronavirus registrado hasta el momento- y la reapertura paulatina de restaurantes y alojamientos.
“En pocas palabras, se trata de crear un corredor turístico seguro y exclusivo para estos 8 municipios que dinamice la economía de nuestros pueblos sin perjudicar a nadie en materia sanitaria”, refirió el secretario de Gobierno de Tornquist, Ezequiel Gabella.
El plan fue gestado en ese municipio y obtuvo la adhesión de los restantes distritos.
Al respecto Javier Andres, intendente de Adolfo Alsina había adelantado que «el sector presentó a la provincia un proyecto para generar corredores turísticos “burbuja” en distritos donde no haya circulación comunitaria». “La idea es que se pueda circular de uno a otro, en diferentes fases”, dijo Andres y agregó que el gobierno provincial “está viendo con buenos ojos ciertas flexbilizaciones en distritos sin circulación comunitaria” de coronavirus.
“Esa es raíz de nuestro pedido -continuó el funcionario-. Los prestadores turísticos ven, por un lado, que no hay casos positivos en éste y otros distritos vecinos, pero al mismo tiempo no logran que les permitan trabajar. Algunos la están pasando muy mal. Hace 75 días que no tienen ingresos y están al límite”.
El plan parte de un argumento difícil de rebatir: si en distritos linderos no hubo casos positivos desde que se inició la cuarentena, ¿por qué no permitir el intercambio turístico entre ambos?
“Aquí estamos totalmente ajenos a la realidad sanitaria que hoy padecen zonas como el Conurbano -subrayó Gabella-, por lo que están dadas las condiciones para ir flexibilizando todas las actividades, incluida la turística”.
El programa se inscribe en la etapa Preventivo-Productiva de la cuarentena, que comenzó con la reapertura de comercios hace algunas semanas. El próximo paso que establece es la libre circulación de las personas dentro de su propio distrito, con la posibilidad de hacer uso pleno de espacios verdes y paseos.
“En esta fase proponemos además habilitar restaurantes y locales gastronómicos. Sería con un protocolo específico, que entre otras cosas implique trabajar con el 50% de la capacidad total y con un solo turno por día”, detalló Gabella.
“Esta sería una etapa corta, de no más de 15 días; sería casi una prueba piloto”, añadió.
La siguiente etapa contempla el aspecto más relevante del programa: la circulación libre de personas entre los distritos que ingresen al programa, con la posibilidad de que puedan acceder a los locales gastronómicos.
“Allí se empezará a sentir el impacto positivo sobre la economía de cada comunidad. Y, si todo sale bien, la última medida será habilitar los alojamientos y el pernocte en los distintos destinos”, completó el funcionario.
En este punto, el éxito del programa dependerá de un factor clave: la rigurosidad de los controles en los accesos a cada distrito.
“Una vez que la Provincia nos autorice, los municipios intervinientes tendremos que firmar un acuerdo-marco que unifique los protocolos a aplicar en los controles y le dé al gobierno bonaerense la certeza de que se trabaja a conciencia y con la mayor seriedad posible”, indicó el secretario de Desarrollo de Tornquist, Gonzalo Iparraguirre.
El plan Turismo Seguro contempla, además, que la Provincia disponga la apertura de todos aquellos atractivos que estén bajo su órbita dentro de los municipios intervinientes, como el Parque Provincial Ernesto Tornquist.