La ola de inseguridad llegó a Sarandí durante la madrugada, donde una pareja de jubilados y una de sus hijas sufrieron un brutal robo en su casa. A la joven le tuvieron que realizar cinco puntos de suturas por golpes que le propiciaron los ladrones.
“Entraron a las 3.30 de la mañana. Parecían fantasmas y enseguida me empezaron a golpear. Me quise retobar y me puse en guardia, pero uno me dio una piña desde atrás y me volteó”, contó uno de los jubilados.
“Querían plata. Tiraron todo al piso. Hasta los remedios me rompieron. Actuaron con mucha saña. Y tenían guantes negros y fueron muy violentos”, agregó el jubilado. “Chillé todo lo que pude. A mí me empujaron y dieron unos golpes, pero mucho menos que a él”, sostuvo la otra dueña de la casa.
Tras alertar a la Policía de lo ocurrido, agentes del Grupo Técnico Operativo (GTO) de la comisaría Primera de Avellaneda concurrieron al lugar y obtuvieron imágenes de las cámaras de seguridad ubicadas en las inmediaciones.
Personal de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) 4 del Departamento Judicial de Avellaneda-Lanús dispuso allanar en urgencia el domicilio del conductor del auto, donde se secuestraron 1.500 dólares, un cargador de pistola calibre 9 milímetros y dos cadenas doradas.