El ministro de Economía, Luis Caputo, está evaluando la posibilidad de mantener sin aumentos las tarifas de luz y gas durante todo el invierno.
Este período es conocido por un aumento en el consumo energético, lo que eleva las boletas y los subsidios. La medida apunta a desacelerar la inflación y aliviar el impacto económico en los usuarios, aprovechando el mayor margen fiscal del Gobierno.
Esta posibilidad fue confirmada por el vocero presidencial, Manuel Adorni, en su conferencia de prensa matutina. “Aún no hemos tomado una decisión definitiva, pero es una opción. Con superávit fiscal, podemos distribuir mejor el ajuste y no cargar todo el peso en ciertos sectores de la sociedad”, explicó Adorni.
En mayo, Caputo ya había decidido posponer los incrementos mensuales en los servicios de electricidad y gas natural, que la Secretaría de Energía había planeado para mantener las tarifas de transportistas y distribuidoras en términos reales.
Además, se postergó el aumento del boleto de colectivo y la subida del impuesto a los combustibles, impactando directamente en los precios de la nafta y el gasoil.
